Martín Palermo metió un frentazo para abrir el marcador
El sueño de alcanzar la séptima corona se esfumó en el Maracaná. El equipo Xeneize se plantó con la mística copera y personalidad para superar en el juego a Fluminense pero no pudo traducir su supremacía en el marcador. Es cierto que había hipotecado sus chances de clasificación tras el empate 2 a 2 en la ida pese que había consumado varias hazañas como visitante. Boca se fue derrotado de Brasil con la cabeza en alto y la seguridad de saber que no tuvo un rival superior, sino que fue víctima de sus propios errores.
El equipo Xeneize asumió el protagonismo en los primeros minutos con el liderazgo de Sebastián Battaglia e hizo circular la pelota por los laterales, aprovechando el ancho del campo de juego. La falta de profundidad fue compensándose con varias llegadas, pero no pudo establecer una diferencia en el marcador. En el inicio del segundo tiempo, Boca siguió generando situaciones y a los 12 minutos, tras un desborde de Dátolo por izquierda, terminó en un centro que fue conectado por Palermo de cabeza.
La ventaja duró apenas cinco minutos cuando Washington igualó tras una brillante excelente ejecución de tiro libre. El desnivel llegó a los '25, en un contragolpe donde Conca se llevó la pelota por izquierda, envió el centro e Ibarra, que volvía, modificó la trayectoria y descolocó a Migliore. Sobre el final y con la defensa descompensada, Dodó convirtió el 3 a 1 definitivo.
Es cierto que las lesiones en cadena lo afectaron, no fueron determinantes pero sí condicionantes para el óptimo rendimiento del equipo. Primero cayó en desgracia el Negro Ibarra en el torneo de verano, quien no se pudo recuperar plenamente y apenas disputó cuatro partidos completos en el semestre. Luego le siguieron en fila Gabriel Paletta y Morel Rodríguez en la defensa, de la que sólo salió indemne Cáceres; Riquelme que se perdió dos partidos de la primera fase y hasta Castromán que disputó apenas cinco minutos...
La angustiosa clasificación en primera fase, rememoró a la del año anterior, haciendo presagiar el mismo desenlace. Es cierto que Boca dependió de un tercero para lograr el pase a octavos y de allí en más confió en sus propias capacidades. No logró sacar una buena diferencia ante Cruzeiro como local y le ganó en la revancha por primera vez en el Mineirao; fuera de su cancha (en Vélez) empató con Atlas y en el Jalisco donde había perdido en primera ronda, goleó 3 a 0. Pese a saberse superior a Fluminense, hipotecó sus chances tras el insólito empate luego del error de su arquero; en el Maracana jugó de igual a igual, se puso en ventaja con estirpe de campeón, mostrándose superior. La derrota en el global por 5 a 3 deja un sabor a injusticia pero el orgullo de haber representado al fútbol argentino como se merece, a lo grande, a lo Boca.
Partido de vuelta de la semifinal de la Copa Libertadores 2008
Fluminense (3): Fernando Henrique; Gabriel, Thiago Silva, Luiz Alberto, Junior César; Ygor, Arouca, Cícero; Darío Conca, Thiago Neves y Washington. DT: Renato Gaúcho.
Boca (1): Pablo Migliore; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Gabriel Paletta, Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; Rodrigo Palacio y Martín Palermo. DT: Carlos Ischia.
Cambios: ST al inicio Pablo Ledesma por Vargas (B), 15m Dodó por Ygor (F), 33m Mauro Boselli por Morel Rodríguez (B), 34m Mauricio por Thiago Neves (F), 39m Cristian Chávez por Dátolo (B), 45m Roger por Washington (F).
Goles: ST 12m Palermo (B), 17m Washington (F), 25m Ibarra, en contra (F), 45m Dodó (F).
Cancha: Maracaná, Río de Janeiro
Árbitro: Carlos Torres (Paraguay)
Jugado el 4 de junio de 2008
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