martes, 23 de diciembre de 2008

Campeón de la adversidad

La sana costumbre. Boca logró el título superando todos los obstáculos

En un final apasionante dentro de un torneo lleno de matices el equipo Xeneize se consagró como nuevo campeón del fútbol argentino. Una nueva vuelta olímpica que le permite recuperar prestigio en el ámbito local, con un título que le era esquivo hace más de dos años, cumpliendo con el objetivo trazado a principios del segundo semestre. Un nueva estrella que brillará en el firmamento azul y oro con el placer infinito de ver a su eterno rival en el fondo de la tabla.

El camino hacia la obtención del vigésimotercer título del profesionalismo estuvo colmado de dificultades. La pubialgia que afectó a Palacio que aportó su fútbol a cuentagotas, las lesiones de ligamentos de Palermo y Paletta, la mala condición física con lo que volvió Riquelme tras los juegos Olímpicos, la humillante goleada sufrida ante Godoy Cruz en Mendoza, el Caranta-gate, los conflictos internos que reabrieron el cabaret clausurado hace diez años, la muerte del presidente Pedro Pompilio, los once puntos de diferencia que le había sacado San Lorenzo...

El grupo se fortaleció ante cada inconveniente y protagonizó una remontada brillante con el liderazgo futbolístico de Battaglia y Riquelme. El aporte de los pibes que asumieron responsabilidades, aportando 18 de los 36 goles convertidos, nada menos que el 50%. Estuvieron a la altura. Los zagueros Roncaglia y Forlín brindando seguridad, Mouche y Noir desequilibrando, Gaitán y Chávez para la creación, Viatri para el gol y García para agarrar un arco caliente. La victoria ante River que terminó con el cabaret y marcó el inicio de una racha de cinco victorias consecutivas para arribar a la cima. La victoria ante San Lorenzo -el rival directo- en una tarde muy especial. La categoría que impuso en el desempate pese a haber dependido de sí mismo en la anteúltima fecha...

El último escollo era Tigre, rival ante el cual le bastaba empatar o perder hasta un gol. El inesperado gol de Lázzaro a los 23 minutos del complemento, hizo sufrir a Boca hasta el epílogo y terminó utilizando al tercer arquero, el debutante Josué Ayala. Pero tanta angustia contenida tuvo su premio, para la felicidad de la mitad más uno del país.

Para el último compromiso, Boca llegó sin Riquelme ni Vargas, suspendidos por llegar al límite de cinco amonestaciones. Con la ausencia de Román se notó cierto nerviosismo y quedaron expuestas varias imprecisiones. Poco se aprovechó el ancho del terreno de juego, el juego fue más bien vertical. El ingreso de Palacio le aportó dinámica al ataque, pero no pudo resolver todo por su cuenta. Ahí se agrandó Battaglia, el león del mediocampo, vital para aportarle equilibrio al equipo con la tarea de marcar, jugar y asistir.

El conjunto de Victoria amenzó más de lo que concretó, pero cada pelota que merodeaba el arco Xeneize generaba temor y se oían murmullos desde las tribunas. La angustia parecía interminable. Por eso el desahogo del final, la felicidad que se desató en Avellaneda y se propagó por todo el país.

El podio, las medallas, la copa, los papelitos, la pirotecnia... La vuelta olímpica. Boca es el campeón y River, último. Para la historia.


Síntesis del segundo partido del triangular de desempate

Boca (0): Javier García; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Facundo Roncaglia, Claudio Morel Rodríguez; Cristian Chávez, Sebastián Battaglia, Jesús Datolo; Leandro Gracián; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Tigre (1): Luis Ardente; Pablo Jerez, Norberto Paparatto, Juan Carlos Blengio, Rodolfo Arruabarrena; Sebastián Rosano, Jonathan Blanco, Matías Giménez, Martín Morel; Carlos Luna y Leandro Lázzaro. DT: Diego Cagna.

Cambios: ST 0m Alvaro González por Dátolo (B), 10m Rodrigo Palacio por Figueroa (B), 17m Leonel Altobelli por Rosano (T), 24m Josué Ayala por García (B), 27m Sebastián Rusculleda por Giménez (T), 42m Mauro Villegas por Arruabarrena (T).
Gol: ST 22m Lázzaro (T).
Amonestados: PT 33m Roncaglia (B), 34m Morel (T); ST 42m Altobelli (T), 45m Palacio (B), 45m Ayala (B).
Expulsados: ST 45m Palacio (B), por doble amonestación.
Cancha: Racing


Posiciones finales




Posiciones del triangular de desempate




La campaña




El plantel



Referencias: PJ: partidos jugados TIT: titular MJ: minutos jugados GC: goles convertidos GR: goles recibidos E: entró S: salió TA: tarjetas amarillas TR: tarjetas rojas

sábado, 20 de diciembre de 2008

Ohhh... se viene Boca campeón


Una joya. Palacio reapareció y marcó el segundo de contraataque

Es sabido que la experiencia de Boca en finales, pesa. El equipo había dado sobradas muestras de personalidad para enderezar el rumbo a mitad de camino y convertirse en candidato superando diversidad de obstáculos. Claro que al llegar a la cima tuvo que confirmar su candidatura y cedió terreno para brindarle a sus perseguidores la chance de un desempate. También es sabido que las fases regulares le pesan y debe apelar a factores externos (o internos) para encontrar la motivación necesaria con el fin de un objetivo.

En el ambiente futbolero se instaló la teoría de un triangular hecho a la medida de Boca, sospechas sobre los árbitros por sus supuestos fallos condescendientes, lamentos anticipados de hinchas y cuerpo técnico que fueron el festín de la prensa amarilla y no tanto. Todo el juego diálectico previo se vio reflejado en los primeros minutos del partido que se presentó friccionado y con los nervios propios de una final.

Tal es así que el vértigo que adquirió el encuentro frenó de golpe a los 19 minutos tras el choque de cabezas entre Silvera y Forlín que paralizó a la mayoría de los espectadores. El defensor de Boca llevó la peor parte al caer con el cuerpo inerte sobre el césped con sus ojos desorbitados y sufriendo convulsiones. Se temió lo peor y surgió la indignación espontánea por la falta de accesos de una ambulancia, evidenciando una precarización indignante por parte de los dinosaurios que conforman la monarquía futbolera.

El partido se reanudó ocho minutos más tarde pero el fútbol tardó en reaparecer. Apenas insinuó Boca con un tiro libre que Morel Rodríguez le robó a Riquelme que se fue por encima del travesaño. Luego comenzó el show de las amarillas, curiosamente teniendo como participantes a varios de los jugadores más temperamentales como Aguirre, el Chaco Torres y Morel Rodríguez.

Cuando se cumplieron los 45 minutos, Baldassi adicionó siete minutos por el lapso en que estuvo detenido el juego tras esa acción desafortunada. Una jugada sin trascendencia terminó en corner a favor de Boca que ejecutó Riquelme. Con la precisión que lo caracteriza, envió el balón al área que conectó Viatri con un frentazo para vencer la resistencia de Orión.

En el complemento Boca pareció tener dominado el control del partido hasta que en una jugada intrascendente, tras un remate de Solari desde fuera del área, Javier García no pudo retener el balón que se le coló por entre las piernas. Todo volvía como al principio, aún sin hacer San Lorenzo méritos suficientes como para empardar las acciones. Por momentos, la estructura de Boca tambaleó e Ischia mandó a la cancha a Palacio por Figueroa para impimirle mayor dinamismo al juego. Para colmo de males, Riquelme fue amonestado y llegó a la quinta amarilla por lo que debeá perderse el partido final frente a Tigre. Antes habá sucedido lo mismo con Vargas, ambos piezas fundamentales del mediocampo.

Cuando San Lorenzo transitaba el mejor momento del partido, contó con un corner a favor que ejecutó Aureliano Torres, cabeceó Aguirre y contuvo García. El arquero sacó rápido buscándolo a Dátolo, éste durmió la pelota con la zurda y la cambió hacia la derecha, Riquelme la bajó de primera hacia el corazón del área y Palacio mandó el balón al fondo del arco. Un paradigma para el manual del contraataque moderno.

Los nervios del CASLA1 fueron in crescendo y el equipo perdió definitivamente el control tras la expulsión de Aguirre por bajarlo a Palacio de una patada. En otro cambio acertado a la luz del resultado, Ischia sacó al colombiano Vargas y mando al campo a Cristian Chávez, para darle más vértigo al ataque Xeneize e intentar de liquidar el pleito. En la primera que contó el Pochi -que no actuaba desde hace más dos meses-, remató un el balón pasó cerca del palo derecho de Orión. El mediocampista insistió, y en tiempo de descuento tomó un balón en la puerta del área con perfil derecho, enganchó para la zurda y sacó un remate cruzado para marcar el 3 a 1 definitivo y dejar a Boca a un paso de una nueva estrella. El martes frente a Tigre tendrá tres resultados a favor: la victoria, el empate y hasta una derrota por un gol para consagrarse campeón luego de dos años y medio en el ámbito local.

Los hinchas del Ciclón, habían iniciado en pleno espíritu triunfalista, gestiones para habilitar la entonces clausurada cancha de Huracán para dar la vuelta en la 17ª fecha en la cara de su eterno rival. Ahora deberán conformarse con sacar la sortija en una calesita del Parque Lezama.

Síntesis del primer partido del triangular de desempate

San Lorenzo (1): Agustín Orión; Adrián González, Gastón Aguirre, Nicolás Bianchi Arce, Aureliano Torres; Pablo Barrientos, Cristian Ledesma, Juan Manuel Torres; Santiago Solari; Gonzalo Bergessio y Andrés Silvera. DT: Miguel Russo.

Boca (3): Javier García; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Juan Forlín, Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Cambios: PT 26m Cristian Chávez por Silvera (SL), 26m Facundo Roncaglia por Forlín (B), 37m Juan Carlos Menseguez por Chávez (SL); ST 18m Rodrigo Palacio por Figueroa (B), 35m Cristian Chávez por Vargas (B), 45m Santiago Hirsig por Solari (SL).
Goles: PT 45m Viatri (B); ST 16m Solari (SL), 31m Palacio (B), 45m Cristian Chávez (B).
Amonestados: PT 29m Bergessio (SL), 32m Juan Manuel Torres (SL), 41m Morel Rodríguez (B), 45m Aguirre (SL); ST 6m Vargas (B), 8m Adrián González (SL), 19m Roncaglia (B), 23m Riquelme (B), 39m Bianchi Arce (SL), 43m Dátolo (B), 43m Orión (SL), 44m Palacio (BJ), 45m Barrientos (SL).
Expulsados: ST 34m Aguirre (SL), 41m Bergessio (SL), ambos por doble amonestación.
Cancha: Racing
Arbitro: Héctor Baldassi
Jugado el 20 de diciembre de 2008

1 Club argentino sin Libertadores de América

viernes, 19 de diciembre de 2008

Historia de los desempates


El primero. Así lo reflejó la portada de diario El Mundo el 12/02/1939*


1937 - Boca vs River

En la 16ª fecha del campeonato de 1937 se produjo un hecho histórico: con la victoria ante River, Boca lo alcanzó en la cima de la tabla de posiciones y ambos compartieron ese lugar por primera vez en el profesionalismo. En la fecha siguiente, en el cierre de la primera rueda del certamen, ambos ganaron sus respectivos compromisos y culminaron igualados. Pese a que el campeonato era a dos ruedas, el reglamento marcó que debían jugar un partido de desempate. El mismo no se disputó en lo inmediato, el certamen siguió su curso y el conjunto Millonario se consagró campeón. Dos años más tarde, por fin se programó el encuentro en cancha de San Lorenzo antes del inicio del campeonato de 1939. Ante la concurrencia de 40.000 espectadores, River sacó dos goles de ventaja en los primeros minutos, pero Boca reaccionó y con tres tantos de José Lizhterman -de fugaz paso por la institución- dio vuelta el tanteador. Sin embargo el equipo de la banda roja se impuso finalmente por 5 a 3 en un encuentro totalmente intrascendente. El mismo quedaría sepultado en el olvido hasta mediados de la década del '90 cuando diversos historiadores del fútbol argentino sacaron este Superclásico a la luz, aunque sea como un hecho meramente estadístico.

1950 - Boca vs Independiente

En el campeonato de 1950, el conjunto Xeneize y el Rojo quedaron igualados en la segunda posición con 39 puntos, ocho unidades por debajo de Racing, el campeón que al año siguiente lograría el tercer título de manera consecutiva. Para definir el segundo puesto se enfrentaron en partidos de ida y vuelta a comienzos de diciembre, también en cancha de San Lorenzo. En el primero Boca cayó derrotado por 3 a 2 y en la revancha se impuso por el mismo marcador. Debieron jugar un tercer partido que terminó igualado 3 a 3. Finalmente se decidió que el escolta de la Academia sería el que contara con mejor gol average (los goles a favor dividido por los goles en contra) en la temporada y el conjunto de la Ribera ganó por 1,28 a 1,25.

1958 - Boca vs San Lorenzo

En 1958 el campeón fue nuevamente Racing y tanto Boca como San Lorenzo igualaron el segundo puesto. Se jugaron dos partidos de desempate en abril de 1959 en cancha de Huracán. En la ida, ganó el Ciclón por 4 a 3 y en la revancha se impuso el conjunto auriazul por 3 a 1. Pese a haber sacado mejor diferencia de gol en el desempate, el sistema que se utilizó fue otra vez el gol average y ahí Boca ganó por 1,45 a 1,40.

1974 - Boca vs Ferro

El campeonato Nacional fue disputado en dos grupos y los dos primeros de cada zona avanzarían al cuadrangular final. En la zona B, Boca y Ferro compartieron el segundo puesto detras de Newell's y aunque el equipo Xeneize contó con mejor diferencia de gol (+16 contra +8) debieron recurrir a un encuentro de desempate. El mismo se disputó en cancha de Vélez tres días después de finalizar la primera fase donde Boca se impuso por 2 a 0 con goles de García Cambón y Ramón Ponce. En el cuadrangular final se enfrentó con Newell's, Rosario Central y Huracán y culminó en la tercera posición. El conjunto leproso se consagró campeón.

1976 - Boca vs Quilmes

Luego de conseguir el torneo Metropolitano, Boca encaró el Nacional con la firme intención de repetir. El campeonato estuvo dividido en cuatro zonas y Boca igualó la primera posición con Quilmes, y aunque también estaba beneficiado por la diferencia de gol, debió dirimir el liderato con la única finalidad de determinar los cruces en cuartos de final. El partido se jugó dos días después de disputar la última fecha y Boca se impuso al Cervecero por 2 a 1 con tantos de Abel Alves y Armando Ovide. En la fase final, el equipo del Toto Lorenzo derrotó sucesivamente a Banfield en cuartos, a Huracán en semifinal y se enfrentó a River en la única final disputada entre ambos en el profesionalismo. Boca le ganó por 1 a 0 con gol del Chapa Suñé de tiro libre.

2006 - Boca vs Estudiantes (LP)

La historia reciente muestra una herida que aún no cicatrizó, aunque el fútbol siempre deja oportunidad para la revancha. Boca se encaminaba hacia un cómodo tricampeonato, cuando el monarca Julio Grondona le quitó al DT Alfio Basile al equipo Xeneize en medio del certamen para designarlo en la Selección. Los dirigentes, pese a tener la posibilidad de continuar con piloto automático de la mano de Jorge Ribolzi, el ayudante del Coco, decidieron contratar al mediocre de Ricardo La Volpe, tercer arquero del Mundial 1978. A dos fechas del final, Boca necesitaba sólo un punto para lograr el tercr título consecutivo, pero sendas derrotas ante Belgrano en Córdoba y Lanús en la Bombonera permitieron que Estudiantes lo iguale en el primer puesto. En el partido desempate jugado tres días más tarde en cancha de Vélez, Boca no logró recuperarse anímicamente y cayó derrotado por 2 a 1 luego de star en ventaja con un gol anotado por Martín Palermo.

2008 - Boca vs San Lorenzo vs Tigre

Por primera vez en torneos cortos y por segunda ocasión en el profesionalismo, tres equipos terminaron igualados en el primer puesto y deberán enfrentarse en un triangular para definir al campeón. En el Nacional de 1968, Vélez enfrentó a River y Racing e igualó el primer puesto con el equipo Millonario, adjudicándose el torneo por mayor cantidad de goles a favor en la fase regular del certamen.


*Gentileza de Sergio Lodise, historiador de Boca Juniors y co-autor de "Boca, el libro del Xentenario"


Esto es mentira

Un lejano recuerdo


Por Marcelo Guerrero, Diario Olé

"Hace 36 años también hubo un triangular para definir al campeón, pero no por un triple empate en la 1ª posición sino por una insólita medida de la AFA. El Nacional 72 se disputó en dos zonas. San Lorenzo ganó la A, escoltado por River. Boca se llevó la B, seguido por Colón. Por una reglamentación absurda que se aplicó por única vez, el 2° de una zona no iba a la semifinal si quedaba a tres o más puntos de distancia del 1°. Como Boca sumó 22 y Colón 18, los santafesinos no entraron al Top 4. Más ridículo aún fue cruzar a Boca, el vencedor más amplio de una zona, con River. Se benefició San Lorenzo: esperó el superclásico (2-3) y definió descansado a las 72 horas (1-0 en alargue) ante un River exhausto. Vale contar esto ahora que algunos rezongan por presuntas ventajas".

Otra vez el periodista Marcelo Guerrero metiendo la pata. El "defrentista" de Boca del diario deportivo Olé no chequea nada, cuando desde su alto rango periodístico y evidente soberbia tendría que dar el ejemplo, si es que lo puede dar realmente. El mismo afirma en su columna del jueves 18 de diciembre que "por única vez, el 2° de una zona no iba a la semifinal si quedaba a tres o más puntos de distancia del 1°. Como Boca sumó 22 y Colón 18, los santafesinos no entraron al Top 4". Está claro la reglamentación de la época, pero ¿por qué si en una semifinal un equipo queda excluido, ésta se transforma automáticamente en desempate? Está más que claro su contradición y que tanto Boca como River disputaron la semifinal para clasificar a la final frente a San Lorenzo, el equipo que cosechó más puntos en la fase regular del Nacional 1972.

En todo caso, si el conjunto Sabalero clasificaba, como debería haber sucedido, los choques de semifinales hubieran sido San Lorenzo vs Colón y Boca vs River. Como los santafesinos quedaron eliminados por una absurda reglamentación (entre tantos mamarrachos que se vienen sucediendo en el fútbol argentino desde 1967), el Ciclón se clasificó automáticamente para la final.

Ya le había pifiado al citar una estrofa del himno Xeneize en una de sus pseudo columnas. El lunes 3 de marzo de 2008 en la página 5 del diario, Guerrero afirmó tras un partido que "los jugadores homenajearon a los voluntariosos muchachos que hicieron de la garra un himno del club (Boca nunca deja de luchar)". El himno oficial, en realidad dice: "Boca nunca teme luchar". Grave error para quien se dice "gran conocedor de la épica Xeneize". También pecó de mercenario -como toda la prensa amarilla de Olé- al afirmar que con el gol Nº 180, Martín Palermo se convirtió en el máximo goleador de la historia de Boca, alcanzando a Francisco Varallo.

Cherro (Cerro), Roberto Eugenio: "Es el máximo goleador de la historia del club", Boca, Enciclopedia de un sentimiento, Olé 2002. Editor: Marcelo Guerrero. En tanto que en la edición "Boca Xentenario" de Olé de 2005, cuyo editor fue el mismo Guerrero, en la página 24 hay una nota titulada "Los goleadores Xeneizes". Números más o menos, el primer lugar le sigue correspondiendo a Cherro con 210 goles, lo siguen Tarasconi con 192, Varallo con 181 y Sarlanga con 115. En ese momento, Martín Palermo recién había alcanzado el centenar de goles en con la camiseta auriazul. Resulta curioso que tres años después, en una revista publiquen el Top 50 de goladores de Boca, encabezado por Varallo y Palermo con 180 goles. ¿No era que Cherro tenía 210?

lunes, 15 de diciembre de 2008

Probala, no seas el último


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Ultimo

Por primera vez en el profesionalismo, River cerró la tabla de un torneo. Ayer mostró cierta mejoría, pero no pudo mantener el triunfo parcial frente a Estudiantes. Es la peor campaña de su rica historia

Por: Germán Castillo, diario Clarín*

Se terminó. No hay más Apertura para River. Por suerte, a los de Núñez se les acabó el sufrimiento. A todos. A los jugadores, que desde hace varias fechas no querían ni salir a la cancha y ya ni lo disimulaban. Al técnico interino Gabriel Rodríguez, quien se hace cargo de culpas extrañas y ni siquiera pudo disfrutar de sus éxitos personales como coordinador de las súpercampeonas divisiones inferiores (siete títulos sobre nueve). A los dirigentes, que no encontraron explicaciones y que son señalados por más de uno como responsables de este día a día del equipo. Y a los hinchas, claro. A los pobres hinchas, que ya no dan más. Que no pueden creer que su equipo haya terminado último. Que no pararon de alentar y de concurrir a las canchas en los últimos partidos para alentar sin parar, casi inexplicablemente. Se acabó. Adiós Apertura. River respira. Y el sufrimiento que parecía crónico durará un par de días más, seguramente, pero se renovará la ilusión a partir del 5 de enero cuando asuma Néstor Gorosito como nuevo DT.

El maltrecho River pasó ayer por el estadio Ciudad de La Plata. Y aunque mostró cierta mejoría, finalmente no pudo mantener el 1-0 parcial ante Estudiantes. El empate lo condenó al sótano.

Lo peor de todo es que la realidad ya no lastima: parece costumbre. Porque este River no aparece desde hace seis meses. Porque, y hay que recordarlo, este equipo que ayer clausuró su participación en el Apertura cerrando la tabla y mirando a todos desde bien abajo, hace exactamente un semestre se consagraba campeón. Y eso, en vez de ser consuelo por el título obtenido este mismo año, mortifica más. Potencia los dolores. De los jugadores, del entrenador, de los dirigentes, de los hinchas, de todos.

Lo seguro es que el concepto del semestre de este River no cambia por el partido de anoche. Imposible. La historia fue demasiado larga como para cerrarla en un solo encuentro. Ni Daniel Vega ni Juan Ojeda estuvieron a la altura de las circunstancias en el arco. Paulo Ferrari alternó buenas y malas, y con eso le alcanzó para ser de lo mejor del equipo: toda una muestra. Gustavo Cabral, Facundo Quiroga, Eduardo Tuzzio, Mateo Musacchio y Danilo Gerlo poco aportaron. Cristian Villagra no fue ni por asomo el del torneo pasado, cuando parecía que Diego Simeone había recuperado al lateral que sorprendía en Central. Augusto Fernández arrancó sin pretemporada y lo pagó. Oscar Ahumada se la pasó dando explicaciones por sus dichos antes que por su juego. Leonardo Ponzio fue líbero, lateral, volante central o por derecha; todo y nada, y así es difícil. Matías Abelairas fue muy diferente al del arranque del año, lo mismo que Diego Buonanotte, quien terminó sin siquiera ser titular anoche. Radamel Falcao marcó algunos goles, pero no fue goleador. Y Santiago Salcedo parece que sigue en Rosario: en River nadie se enteró de que hace rato tiene puesta la camiseta de la banda.

Y los suplentes lo mismo. Nada entregaron. Ni Martín Galmarini, ni Diego Barrado (desperdició otra oportunidad en River), ni Robert Flores, ni Rodrigo Archubi, ni Rosales, y tampoco los pibes Mauro Díaz, Gustavo Bou y Andrés Ríos, al igual que el debutante Fabio Giménez.

Muchos no entendieron por qué Diego Simeone dejó el equipo justo cuando, pese a ser finalmente eliminados, los jugadores mostraron algún tipo de reacción ante Chivas de Guadalajara, en los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Pero tuvo razón el entrenador: él ya no podía sacarle algo positivo al equipo. El tema es qué les dijo a los dirigentes en la intimidad. Quizás los aconsejó y de verdad se viene una limpieza histórica en el equipo. Quizás, no. Habrá que ver. Lo seguro es que Gabriel Rodríguez tampoco pudo sacarles demasiado a los futbolistas. Por eso sufrió River. Y por eso aquella decisión del Cholo, quien también tuvo culpas en esta historia -que quede claro-, cada vez se entiende más.

*Nota publicada el domingo 14 de diciembre de 2008


Un equipo para poner en un cuadro (dado vuelta)



Arriba: Gustavo Cabral, Daniel Vega, Martín Galmarini, Mateo Musacchio y Eduardo Tuzzio. Abajo: Mauro Rosales, Radamel Falcao García, Augusto Fernández, Paulo Ferrari y Matías Abelairas.


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Los logros deportivos más destacados de 2008




Campeón fútbol infantil categoría '97
Campeón en handball Super 4 - LHC
Campeón juvenil en hockey sobre patines
Campeón del Nacional de Mayores de natación de verano
Campeón en los play off de pelota paleta en la Liga Municipal de Zona Norte


Ranking de los "últimos" del fútbol argentino

1 - Chacarita 7
2 - Atlanta 7
3 - Ferro 6
4 - Quilmes 6
5 - Tigre 6
6 - Platense 6
7 - Rosario Central 5
8 - Talleres (Cba) 5
9 - Banfield 4
10 - Gimnasia (LP) 4
11 - Huracán 3
12 - Newell's 3
13 - Argentinos Juniors 3
14 - Instituto 3
15 - Lanús 2
16 - Los Andes 2
17 - Estudiantes (LP) 2
18 - Racing 2
19 - Huracan (TA) 2
20 - San Telmo 2
21 - Talleres (RE) 2
22 - Gimnasia (J) 1
23 - Gimnasia y Tiro 1
24 - Chaco For Ever 1
25 - Deportivo Español 1
26 - Juventud Antoniana 1
27 - San Lorenzo (MdP) 1
28 - Temperley 1
29 - Belgrano 1
30 - Colón 1
31 - Deportivo Mandiyú 1
32 - Huracán (BB) 1
33 - Huracán (SR) 1
34 - Racing (Cba) 1
35 - River 1
36 - Tiro Federal 1
37 - Argentino (Q) 1
38 - Atlético Ledesma 1
39 - Atlético Santa Rosa 1
40 - Atlético Uruguay 1
41 - Bartolomé Mitre 1
42 - Central Córdoba (R) 1
43 - Central Norte 1
44 - Deportivo Italiano 1
45 - Estudiantes (BA) 1
46 - Huracán (CR) 1
47 - Independiente 1
48 - Independiente (T) 1
49 - Independiente Rivadavia 1
50 - Kimberley 1
51 - Mariano Moreno 1
52 - Nueva Chicago 1
53 - Puerto Comercial 1
54 - Sarmiento 1

Fuente: www.rsssf.com

domingo, 14 de diciembre de 2008

Una de suspenso


Toque sutil. Riquelme picó la pelota sobre el arquero para el segundo

El partido con Colón fue una síntesis de la ciclotimia del desempeño de Boca a lo largo del torneo. Una doble aparición fulgurante de Figueroa y el toque de distinción de Riquelme bastaron para que en 27 minutos el equipo Xeneize sacase una ventaja casi decisiva y regule fuerzas para disputar un eventual desempate.

En ese lapso mostró su mejor cara, con actitud, perseverancia y espíritu colectivo para abrir el camino hacia el gol. Los festejos llegaron de manera consecutiva, el primero tras un centro de Vargas que Figueroa conectó de volea. El segundo tras una pared entre Battaglia, Dátolo y Riquelme que éste último definió picando la pelota por encima del arquero. El tercer tanto se originó tras un centro de Dátolo sobre el sector izquierdo que el portero no pudo controlar y Figueroa terminó empujándola con el muslo.

Pero las desinteligencias defensivas sembraron un manto de dudas sobre la solidez que debería tener un aspirante al título. A los 42 minutos del primer tiempo legó el descuento de Colón, que se produjo tras un cabezazo de Lucas Valdemarín que dio en el palo tras una mala salida de Javier García y Nicolás Torres, tras un rechazo, marcó con un zurdazo cruzado. A los siete minutos del complemento, otro imperdonable error de García luego de pifiar un manotazo tras un centro, permitió que Valdemarín aprovechara el balón que quedó inerte para marcar el 2-3.

Pero lejos de tomar excesivas precauciones, el DT Carlos Ischia apostó por Rodrigo Palacio en lugar de Viatri para generar desbordes y descentralizar el juego en el área rival. El arsenal ofensivo incluyó remates de Riquelme, Dátolo, Gaitán; un disparo de Ibarra que se estrelló en el travesaño y hasta un gol de Dátolo que fue mal anulado por el árbitro asistente.

Mientras, en La Paternal, San Lorenzo ganaba por la mínima diferencia y Tigre hacía lo propio frente a Banfield en Victoria. Así, en un cierre no apto para cardíacos, llegaron los finales del Ciclón y el Matador mientras Boca, que empezó el segundo tiempo con una demora de 10 minutos, debió sufrir un rato más. ¿Viveza criolla o ingenuidad? Entre la inestabilidad que lo caracterizó durante el certamen, tras estar con una desventaja de 11 unidades y pasar al frente a dos fechas del final, el conjunto auriazul deberá disputar un triangular junto a San Lorenzo y Tigre para dirimir el campeón. ¿River? Cola.

Síntesis de la 19ª fecha del torneo Apertura 2008

Boca (3): Javier García; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Juan Forlín, José María Calvo; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Colón (2): Diego Pozo; Salustiano Candia, Diego Crosa, Pablo Aguilar; Juan Carlos Falcón, Alejandro Capurro, Germán Rivarola, Alfredo Ramírez; Nicolás Torres; Lucas Valdemarín y Esteban Fuertes. DT: Antonio Mohamed.

Cambios: PT 21m Facundo Roncaglia por Calvo (B); ST al inicio Lucas Acosta por Rivarola (C) y Sebastián Prediguer por Falcón (C), 14m Rodrigo Palacio por Viatri (B), 18m Pablo Garnier por Capurro (C), 32m Nicolás Gaitán por Dátolo (B).
Goles: PT 9m Figueroa (B), 13m Riquelme (B), 27m Figueroa (B), 42m Torres (C); ST 7m Valdemarín (C).
Amonestados: PT 29m Rivarola (C), 38m Candia (C); ST 20m Aguilar (C), 38m Valdemarín (C), 38m Garnier (C), 43m Forlín (B).
Cancha: Boca
Arbitro: Saúl Laverni
Jugado el 14 de diciembre de 2008

domingo, 7 de diciembre de 2008

El que se quema con leche...


León. Seba Battaglia fue la figura de Boca en un empate que resta

Cualquier similitud con el desenlace del Apertura '06 es una mera coincidencia del destino. La mayor frustración de la historia de Boca emerge invitablemente luego del empate 0 a 0 ante Gimnasia de La Plata que permitió que Tigre y San Lorenzo lo igualaran en el primer puesto a una fecha del final. El campeonato ya no depende del equipo Xeneize que deberá vencer primero a sus propios fantasmas del pasado.

Boca no jugó el partido como lo que era: una final. Se notó una preocupante falta de ideas y de voluntad para superar al rival y al sofocante calor. El doble nueve conformado por Figueroa y Viatri no dio resultado y Riquelme no supo cómo transformarse en el eje del juego. En lugar del suspendido Dátolo ingresó el uruguayo Alvaro González, pero el sector izquierdo le quedó a contrapierna, por eso Carlos Ischia lo sustituyó en el complemento. Sólo pudo generar peligro con remates de larga distancia a falta de un puntero derecho que abriera la cancha. Los centrodelanteros relizaron un juego vertical, yendo al choque con los defensores rivales; sólo Viatri se liberó del sistema y se ubicó por momentos fuera del área.

Para compensar el déficit en el circuito creativo, Ischia mandó a la cancha a Gaitán, para tratar de asociarlo con Riquelme, que prácticamente caminaba en el campo. El Negro Ibarra pasó en contadas ocasiones a posición ofensiva, y en una de ellas, a los 7 minutos, quiso emular el gol que le marcó a River por el Clausura 2001, ingresando por derecha, enganchando para adentro y sacando un remate de zurda. Esta vez la pelota se fue cerca del palo derecho de Sessa. Tres minutos más tarde, Forlín con un remate de cabeza tuvo una chance clara y obligó al guardameta a realizar una estirada para desviar el balón por encima del travesaño.

Todo lo bueno realizado en la primera parte se desmoronó en el complemento, cuando Morel Rodríguez se hizo expulsar a los 18 minutos tras una patada a Piatti en una jugada intrascendente sobre el lateral en campo contrario. Para rearmar la línea defensiva, Ischia mandó a la cancha a Calvo, prescindiendo de Figueroa. La alta temperatura a la hora que comenzó el partido condicionó el desarrollo de la primera parte que debió ser suspendida temporariamente para que los jugadores se hidraten. Aún así en el segundo tiempo no se observó una reacción de Boca que fue víctima de su propia impotencia.

En los últimos minutos jugó sus últimas fichas, y tras una combinación entre Riquelme y Viatri a los 36, Gaitán quedó mano a mano con el arquero, que contando con tiempo necesario para retener el balón y buscar un ángulo de disparo, decidió rematar de primera y la pelota se marchó arriba del travesaño. Es cierto que pudo perder, tras una jugada que Neira -tras dejar en el camino a cuatro jugadores Xeneizes- no pudo rematar con precisión y García rechazó el balón con los pies.

Con el empate, Boca perdió la chance de depender de sí mismo y se expuso a un eventual desempate con Tigre y San Lorenzo. En tanto que existe la posibilidad remota que Lanús gane en la última fecha y los punteros igualen, de ser así se produciría un cuádruple empate. Desde el arranque ideal con tres victorias, hasta las derrotas ante Tigre, Godoy Cruz y Estudiantes, los vaivenes fueron una constante en el andar del conjunto auriazul. La remontada luego del Superclásico le permitió alcanzar y superar a San Lorenzo, tras estar 11 puntos por debajo. A dos fechas del final, redujo sus chances de 100% a un 33%. La debacle en el Apertura 2006 con las derrotas consecutivas ante Belgrano y Lanús y el posterior desempate perdido ante Estudiantes aún es una herida abierta. Boca ve una vaca y llora.

Síntesis de la 18ª fecha del torneo Apertura 2008

Gimnasia (LP) (0): Gastón Sessa; Cristian Piarrou, Rubén Maldonado, Ariel Agüero, Diego Villar; Ignacio Piatti, Fabián Rinaudo, Sebastián Romero; Mariano Messera; Franco Niell y Denis Stracqualursi. DT: Leonardo Madelón.

Boca (0): Javier García; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Juan Forlín, Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Alvaro González; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Cambios: ST al inicio Nicolás Gaitán por González (B), 22m José María Calvo por Figueroa (B), 24m Juan Cuevas por Piarrou (G), 26m Juan Neira por Messera (G), 35m Roberto Sosa por Stracqualursi (G).
Goles: No hubo.
Amonestados: ST 21m Rinaudo (G), 44m Romero (G).
Expulsados: ST 18m Morel Rodríguez (B).
Cancha: Estado Corrupción de La Plata
Arbitro: Javier Collado
Jugado el 7 de diciembre de 2008

domingo, 30 de noviembre de 2008

Que de la mano de JR


Es para vos. Riquelme le dedicó el segundo gol a un plateísta VIP*

Pareciera que Boca necesitara de la presencia de enemigos internos o externos para que la bronca sea el disparador de una posterior reacción. Se había complicado el partido ante Racing y tanto Tigre como San Lorenzo aguardaban expectantes para alcanzar en la cima al equipo Xeneize. Boca lo tomó como una final, y pese a ser favorecido por unos fallos arbitrales, ganó merecidamente ante un rival más acostumbrado a arruinar campeonatos que ganarlos. El 2 a 1 con goles de Riquelme lo dejó a un paso del título a dos fechas del final.

A los 38, Román le dio una asistencia a Figueroa y ante la salida de Migliore, Lucho la tiró larga, saltó al arquero y se dejó caer. El árbitro compró el penal. Riquelme no falló desde los doce pasos con un remate preciso al palo derecho de Migliore. Pero la ventaja duró poco, cuando a los 45 del primer tiempo, Racing llegó a la igualdad con un cabezazo de Franco Sosa.

Hasta que llegó la explosión a los 14 del segundo tiempo, cuando Riquelme tomó un rebote tras un remate de Dátolo y de volea puso a Boca nuevamente en ventaja. El balón se metió entre Migliore y el palo y Román fue, buscó e identificó a un plateísta que lo estuvo hostigando para dedicarle el gol. Esa situación pareció motivarlo para calzarse el traje de héroe y darle una nueva victoria a Boca que lo aproxima al título.

Desde el Superclásico jugado en la 10ª fecha, y acompañado por el despegue futbolístico de Riquelme, Boca logró siete victorias en ocho partidos, consiguiendo 21 puntos sobre 24 disputados. El conductor de Boca tuvo influencia decisiva en este tramo que incluyó el pase gol a Viatri frente a River y Central, los tantos frente a San Lorenzo y Arsenal de tiro libre (éste último en el minuto 90), el pase gol a Figueroa en Tucumán y los dos tantos frente a Racing.

Síntesis de la 17ª fecha del torneo Apertura 2008

Boca (2): Javier García; Hugo Ibarra, Julio César Cáceres, Juan Forlín, Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Racing (1): Pablo Migliore; Franco Sosa, Marcos Cáceres, Gabriel Mercado, José Shaffer; Leandro González, Franco Peppino, Franco Zuculini, Adrián Lucero; Maximiliano Moralez y Pablo Luguercio. DT: Juan Manuel Llop.

Cambios: ST al inicio Claudio Yacob por Mercado (R), 23m Pablo Caballero por Lugüercio (R), 27m Alvaro González por Dátolo (B), 30m Pablo Mouche por Figueroa (B), 32m Lihué Prichoda por Zuculini (R), 38m José María Calvo por Morel Rodríguez (B).
Goles: PT 40m Riquelme (B), 45m Sosa (R); ST 14m Riquelme (B).
Amonestados: PT 38m Migliore (R); ST 18m Moralez (R), 35m García (B).
Cancha: Boca
Arbitro: Pablo Lunati
Jugado el 30 de noviembre de 2008

*Very idiot person

martes, 25 de noviembre de 2008

Una persona muy especial



Diez años ya, en los que pasaron tantas cosas en tu vida como en la de todos los componentes del julio 1998, verdadera revolución en la historia boquense. Como lo fue el mayo francés del '68. Me piden que diga algunas cosas sobre vos y me pregunto: ¿De qué hablo primero? ¿Del jugador o del hombre? Voy a mezclar a medida que los recuerdos lleguen. Son tan diferentes como un derecho a un zurdo, pero uno le sirvió al otro en algunas circunstancias de la vida profesional y civil.

Como jugador, sos un imprevisible total. Hasta tal punto que pienso que algunas cosas que intentás, a mitad de camino las cambiás por iniciativa propia o por como se te paró el adversario de turno. Podés ser individual, como colectivo: pecando en las dos para bien o para mal, y ahora paso a explicarlo mejor. Cuando todo va bien, podes acertar en la elección: dominás el balón, mirás, encarás si podes encarar, para como siempre te dije: cara o ceca, pasás o te quedás.

Eufórico, sos capaz de pasar por donde nadie pasa, para luego asistir como muy pocos lo hicieron o lo hacen, sea por arriba o por abajo, colocando a tu partenaire en posición favorable y no complicándole la vida al que va a definir. Cuando te ponés nervioso, te empecinás y así perdés la tranquilidad y la claridad, chocando y discutiendo lo indiscutible. Y te transformás, dejás de ser el tipo lúcido que, manejando las situaciones más al límite, es ideal.

Cuando volví en el 2003, vos sabés que nos preguntamos los dos si éramos los mismos. Un año más tarde lo supimos. Si algo traté, desde el día que decidí ser entrenador, fue conocer lo más rápido posible a mis dirigidos como seres humanos y diferenciar bien a los buenos de los malos; los más bichos; los desconfiados; los inocentes; los naturales; los espontáneos; los solidarios; los positivos; los pasivos; los negativos. En suma, tratar de hacerles una radiografía a cada uno de ellos, los cuales a la larga o la corta, terminan mostrándose como son, para bien o para mal.

Dicho esto, voy a contar una situación clave en la Copa Libertadores 2003. Veníamos bien en los dos torneos, pero sabíamos que no había mucho resto como para bancárnosla, y fue fundamental, por consecuencia, definir la prioridad. En octavos, ir a pelear la vuelta a Paysandú era complicado, desde antes de que se jugara la ida en nuestra cancha. Y mucho más luego de la derrota por un gol, cuando nunca le encontramos la vuelta al partido.

Todo jugador tiene unos partidos por arriba del resto y la vuelta en Belén seguro que debe de estar entre esos partidos destacados de tu carrera. Aquí funcionó el orgullo mas profundo que tenés. Sabías que no había "tu tía", teníamos que tener todos una de esas performances que no se olvidan. Convertiste tres goles e hiciste hacer el cuarto, para luego de 90 minutos épicos decirte a vos mismo: sigo siendo yo, porque después de tantas lesiones cortas -que te sacaban ritmo y continuidad futbolística- las dudas seguramente estaban, a pesar de que uno desea no dar esa impresión.

Por un rato dejo de hablarle a Guillermo para contarles a ustedes algo que tal vez él no se recuerde. Una muestra de que, dentro de la apariencia de Guillermo "El Terrible", existe una persona agradable de tratar, con sus gustos bastante simples, con sus inocencias que se extrañan cuando uno lo conoce y ésta fue una de ellas. Era un partido en la Bombonera, donde Guillermo venía jugando bien. Pero en el segundo tiempo, entre un par de faltas no cobradas, un offside que no fue y un gol que se perdió, se completó un mix que comenzó a condicionarlo, acentuándole los nervios. Llegando al límite, voy y lo saco, y cuando pasó a mi lado lo felicité y le dije al oído: "Sacate los berretines que tenés en el balero". Se sentó y, después de beber agua y recuperarse, viene y me dice: "Disculpe Carlos, ¿me puede decir que significa berretines?". Me empecé a reír como un loco, para luego explicárselo.

Les dije esto porque con Guillermo al principio uno ve a alguien tímido, respetuoso, chispeante, despierto, honesto, medio desconfiado cuando no le gustó el palo, orgulloso en lo más profundo. A quien le da donde más nos duele el no poder lograr lo que desea, pero que igualmente hará lo imposible para lograrlo. Eso lo pinta en carne propia: detrás de esa imagen de molesto, canchero, fastidioso, que puede llegar a armarse quien no lo conoce, existe el otro, ese que les cuento más arriba. Ese es el verdadero. Un gran sentimental, que trata de no demostrarlo, pero que tarde o temprano, "se vende".

Para el final, mis felicitaciones por ser el jugador mas valioso del campeonato de EE.UU., donde aprendieron a comprender tu juego, que no es fácil de entender. En fin, un fútbol especial que terminó eligiendo a alguien, por qué no decirlo, muy especial.

Abrazo Guille. Chau, felicidades.

Carlos Bianchi

domingo, 23 de noviembre de 2008

Capitalismo azul y oro


Volvió al gol. Lucas Viatri celebra junto a González y Figueroa

“Estamos amargados y un poco tristes por lo que ocurrió. Pero nos tenemos que ir contentos a nuestra casa por cómo jugamos en el segundo tiempo”, señaló Carlos Roldán, el técnico de San Martín de Tucumán. "A mí no me gusta hablar de los arbitrajes, pero hay cosas contra las cuales uno no puede pelear. Contra el capitalismo (por los poderosos) no se puede, afirmó irónicamente Roldán al término del partido. Cualquier parecido con una Bambifrase es mera coincidencia.

Las derrotas de San Lorenzo y Tigre le allanaron el camino a Boca, cuyo objetivo, cuestiones de estética y forma aparte, era ganar para alcanzar la cima en la tabla de posiciones. El equipo Xeneize, resentido por las lesiones y con un regular desempeño de sus individualidades logró con más efectividad que lucidez, atesorar tres puntos de oro para depender de sí mismo en el sprint final.

Boca se presentó con una novedad: abandonó la línea de tres defensores y el doble cinco en el mediocampo para retomar el clásico 4-3-1-2 con dos centrodelanteros: Figueroa y Viatri. Luego de una acción confusa dentro del área en los primeros minutos de juego, el árbitro sancionó erróneamente un penal a favor del conjunto auriazul, que Riquelme malogró ante la estirada del portero Gutiérrez. Se había hecho justicia dentro de la propia injusticia. Un minuto después, San Martín respondió con la ejecución de un tiro libre que se estrelló en el travesaño.

Cuando se disputaban 36 minutos, Dátolo avanzó por la izquierda y mandó un centro rasante, que no pudo conectar Alvaro González. El defensor tucumano, lejos de esperar la intervención de Gutiérrez, desde el suelo rechazó la pelota lejos del alcance del arquero y Viatri como oportunista del área, sólo se encargó de empujarla al gol. Una jugada sucia pero que en definitiva sirvió para abrir el marcador.

A los los 14 minutos del complemento, el defensor Raúl Saavedra efectuó un remate el balón con la pierna zurda de otro partido que se coló a la perfeción en el ángulo y dispuso la igualdad. Dentro de la invariabilidad del juego y el escaso lucimiento individual, Boca expuso como principal virtud el oportunismo. Tal es así que logró reaccionar tres minutos más tarde para retomar la ventaja e impedir que el rival, jugando en su propio reducto, lo pusiera en aprietos. Riquelme dispuso de un tiro libre fuera del área, que picó de manera brillante al área para la intervención de Figueroa, que con una exquisita volea de zurda mandó el balón al fondo de las mallas.

El equipo Xeneize, con la victoria en Tucumán, retomó el liderato del certamen luego de 12 fechas y sacó dos puntos de ventaja sobre San Lorenzo y Tigre. En el tramo que se inició en el Superclásico, Boca logró seis victorias en siete partidos logrando 18 puntos (totalizando 32), más del 50% que lo obtenido en las nueve jornadas iniciales.

En un torneo local desvirtuado dentro de una organización obsoleta, el conjunto de la Ribera mantuvo el equilibrio para superar momentos críticos: peleas internas, lesiones, convocatorias, derrotas y cuestionamientos por parte de la prensa amarilla. Es de esperar que al depender de sus propias capacidades en el último tramo del torneo y con la mística ganadora que se transmite de generación en generación, Boca se encamine hacia una nueva estrella que ilumine el firmamento azul y oro.

Síntesis de la 16ª fecha del torneo Apertura 2008

San Martín (T) (1): Marcos Gutiérrez; Germán Noce, Juan Monge, Pablo de Muner; Gerardo Solana, Facundo Pérez Castro, Pablo Cantero, Raúl Saavedra; Patricio Pérez; Daniel Vega y Mario Turdó. DT: Carlos Roldán.

Boca (2): Javier García; Hugo Ibarra, Facundo Roncaglia, Juan Forlín, Claudio Morel Rodríguez; Alvaro González, Sebastián Battaglia, Jesús Datolo; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Cambios: ST al inicio Gustavo Ibáñez por Turdó (SM), 11m Marcelo Quinteros por Solana (SM), 21m Nicolás Herrera por Pérez (SM), 32m Pablo Mouche por Viatri (B), 38m José María Calvo por González (B).
Goles: PT 36m Viatri (B); ST 14m Saavedra (SM), 17m Figueroa (B).
Amonestados: PT 22m Pérez Castro (SM), ST 8m Figueroa (B), ST 37m Cantero (SM).
Expulsados: ST 44m Dátolo (B), 45m Pérez Castro (SM).
Cancha: San Martín (T)
Arbitro: Carlos Maglio
Jugado el 23 de noviembre de 2008

domingo, 16 de noviembre de 2008

Vulnerables


Volvió la Joya. Rodrigo Palacio (14) reapareció luego de 41 días

El escenario estaba preparado para una fiesta. Boca debía ganar para ocupar el liderazgo en el campeonato a cuatro fechas del final. San Lorenzo había empatado en Rosario el sábado y el equipo Xeneize tenía la posibilidad de sacarle un punto de ventaja, lo mismo que a Tigre. Pero no supo elaborar un argumento consistente para doblegar a Vélez que lo superó futbolísticamente y con autoridad.

Ni el entusiasmo de la hinchada, que agranda a su equipo en la Bombonera, logró contagiar al equipo que se encontró en desventaja al cuarto de hora de juego, mediante un cabezazo de Uglessich. Idéntico panorama se vivió en la segunda parte cuando Cabrera marcó el 2 a 0 a favor del conjunto de Liniers. Boca mostró un atisbo de recuperación con el descuento de Forlín de cabeza, tras un tiro libre de Riquelme que pegó en el travesaño y posteriormente en la línea. Pero el tercer gol de Vélez, cinco minutos más tarde, derrumbó anímicamente al conjunto auriazul.

El técnico Carlos Ischia, pese a la baja de Gabriel Paletta por rotura de ligamentos, mantuvo el esquema 3-4-1-2 que tan buenos resultados le había dado en las victorias ante el Ciclón y Arsenal. Lo cierto es que se sucedieron una multiplicidad de factores que afectaron a cada jugador y así fue mermando la respuesta colectiva. Tales los casos de Palermo y Paletta con rotura de ligamentos; Morel, Cáceres y Vargas lesionados; Palacio con una maldita pubalgia y el Caranta-gate que terminó con el arquero borrado.

Uno de los históricos como Ibarra, no está en plenitud y tampoco el esquema lo ayuda, ya que la línea de tres zagueros lo excluye implícitamente como lateral y lo coloca a la altura del mediocampo en función de número ocho. Riquelme, el único irremplazable, no está en su mejor condición física y eso se notó claramente en los últimos partidos, aún así le alcanzó para marcar sendos goles de tiro libre ante San Lorenzo y Arsenal. Juega más de punta que de mediocampista ofensivo y eso repercute negativamente en el circuito creativo del equipo. A Lucas Viatri se le cerró el arco luego de una racha de cinco goles en cinco partidos y acumula la misma cantidad de juegos sin marcar un tanto. Sólo Mouche con su aparición explosiva en los últimos partidos, logró atentar contra la inercia en que se sumergió el equipo.

Con la derrota ante Vélez, Boca sumó tres caídas jugando en la Bombonera en el presente torneo, racha negativa que no se daba desde el Clausura 1998. Con la curiosidad que tanto Tigre, Estudiantes y el Fortín llevaban varios años sin imponerse como visitantes. Con el conjunto de Victoria no perdía como local desde hace 59 años, claro que en ese lapso lo enfrentó apenas en siete oportunidades. En tanto que enfrentando a Estudiantes se le cortó una racha de 12 años sin derrotas (la última había sido en el Clausura 1996) y ante Vélez cayó luego de una década (desde el Clausura 1998 que no sucedía).

Síntesis de la 15ª fecha del torneo Apertura 2008

Boca (2): Javier García; Facundo Roncaglia, Julio César Cáceres, Juan Forlín; Hugo Ibarra, Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Datolo; Juan Román Riquelme; Pablo Mouche y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Vélez (3): Marcelo Barovero; Gastón Díaz, Mariano Uglessich, Marco Torsiglieri, Emiliano Papa; Iván Bella, Leandro Coronel, Fabián Cubero, Víctor Zapata; Jonathan Cristaldo y Roberto Nanni. DT: Hugo Tocalli.

Cambios: ST al inicio Nicolás Gaitán por Dátolo (B), 5m Nicolás Cabrera por Bella (V), 13m Rodrigo Palacio por Cáceres (B), 23m Juan Manuel Martínez por Cristaldo (V), 28m Luciano Figueroa por Viatri (B), 40m Pablo Lima por Zapata (V).
Goles: PT 16m Uglessich (V); ST 6m Cabrera (V), 13m Forlín (B), 18m Cristaldo (V), 39m Palacio (B).
Amonestados: PT 27m Papa (V), 28m Bella (V); ST 8m Cubero (V), 23m Gaitán (B), 33m Mouche (B).
Cancha: Boca
Arbitro: Diego Abal
Jugado el 16 de noviembre de 2008


Lo que viene, lo que viene

16ª fecha vs San Martín T (V)
Ultimo partido: San Martín (T) 1 - Boca 2 (Clausura 1993)

17ª fecha vs Racing (L)
Ultimo partido: Boca 2 - Racing 1 (Apertura 2008)

18ª fecha vs Gimnasia LP (V)
Ultimo partido: Gimnasia (LP) 0 - Boca 1 (Apertura 2008)

19ª fecha vs Colón (L)
Ultimo partido: Boca 2 - Colón 1 (Apertura 2008)

lunes, 10 de noviembre de 2008

Los cracks son así


Crack. Riquelme marcó el agónico gol de la victoria de tiro libre

Y entonces es una de las jugadas finales del partido, aunque creo que vamos a ir hasta el minuto 49, por el tiempo que tardaron en tomar agua... El tiro libre por Riquelme, posición de número 10. Justo, el lugar donde Riquelme pondría la pelota su le preguntan donde quiere un tiro libre.

Riquelme con el tiro libre, se van a cumplir 45 cuando le pegue, cuatro jugadores en la barrera. Juan Román a buscar la victoria, ahí está perfilado para darle él o Gaitán pero será Riquelme el que le pegue. La barrera tiene que ir más atrás, dice el árbitro a pedido de Juan Román, ahora sí está en el lugar que corresponde, le va a dar Riquelme, toma distancia Juan Román, tiróooooo: Gooooooooooooooooooooooooool, gooooooooooooooooooooooooooooooooool de Boca, gol de Boca, de Riquelme, Juan Román Riquelme, de un verdadero maestro del fútbol, allá se fue volando por toda la cancha Juan Román Riquelme, un tiro libre perfecto, absolutamente maravilloso de Rrrriquelme para ganar el partido y mandar a Boca arrrrriba con San Lorenzo de Almagro.

Es lo que tienen los grandes, grandes jugadores, nada de Riquelme casi en la tarde, le dieron una sola oportunidad, un tiro libre en el lugar exacto para él y colgó la pelota del ángulo. A los 45 gana Boca 1 a 0, Riquelme, Juan Román de tiro libre.

Relato de Víctor Hugo Morales en radio Continental AM 590

Síntesis de la 14ª fecha del torneo Apertura 2008

Arsenal (0): Cristian Campestrini; Darío Espínola, Javier Gandolfi, Aníbal Matellán, Cristian Díaz; Sebastián Carrera, Carlos Casteglione, Cristian Pellerano, Javier Yacuzzi; Alejandro Gómez y Luciano Leguizamón. DT: Daniel Garnero.

Boca (0): Javier García; Facundo Roncaglia, Julio César Cáceres, Gabriel Paletta; Hugo Ibarra, Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Datolo; Juan Román Riquelme; Ricardo Noir y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

Cambios: ST al inicio Pablo Mouche por Noir (B), 25m Nicolás Gaitán por Vargas (B), 26m Nicolás Aguirre por Yacuzzi (A), 37m Matías Carabajal por Pellerano (A), 37m Leandro Gracián por Dátolo (B), 44m Darío Benedetto por Leguizamón (A).
Gol: ST 45m Riquelme (B).
Amonestados: PT 29m Noir (B); ST 1m Dátolo (B), 10m Roncaglia (B), 17m Matellán (A), 29m Espínola (A).
Cancha: Arsenal
Arbitro: Saúl Laverni
Jugado el 9 de noviembre de 2008

viernes, 7 de noviembre de 2008

No dejen de aplaudir


Al túnel. Boca quedó eliminado de la Copa Sudamericana con dignidad

Los pibes Xeneizes se quedaron en el camino ante Internacional de Brasil tras la derrota en la Bombonera por 2 a 1, aunque la prioridad siempre fue torneo Apertura. Eso estuvo en claro y por eso el equipo estuvo conformado por mayoría de juveniles y futbolistas experimentados que no son habitualmente titulares. No hubo frustración por parte de los hinchas que se hicieron presentes en la Bombonera, ni les arrojaron con pañales ni con maíz. Todo lo contrario, hubo aplausos en reconocimiento al esfuerzo pese a la derrota que significó la eliminación y la pérdida de un invicto de 29 partidos como local en competencias internacionales.

Los goles llegaron en la segunda etapa, cuando Magrao, del Internacional de Porto Alegre, conectó un centro de Nilmar a los dos minutos que dejó con la obligación a Boca de marcar cuatro goles para no quedar eliminado. Por eso Ischia mandó al campo de juego a Juan Román Riquelme y Jesús Dátolo a los ocho minutos, más Lucas Viatri que había entrado por Cardozo en el descanso. Boca llegó al empate con un penal que ejecutó Riquelme a los once minutos tras una falta que le cometieron a Dátolo. Aún restaban marcar tres goles para lograr la clasificación.

El Inter se plantó de contraataque y consiguió darle el golpe de knock out a Boca a los 26 minutos cuando Alex definió cruzado tras recibir un pase de D'Alessandro. El conjunto auriazul se quedó sin reacción y encima sufrió la expulsión del zaguero Juan Forlín, por doble amonestación. Así perdió un invicto de 29 partidos jugando en la Bombonera por partidos internacionales desde 2003, cuando por la Copa Sudamericana cayó ante Atlético Nacional de Medellín por 1 a 0.

Anoche Boca se despidió de la Copa y apostará todas las fichas al Apertura, donde consiguió cuatros victorias consecutivas que lo colocaron en la punta del certamen junto a San Lorenzo y Tigre. Lo ratificó el director técnico, Carlos Ischia en el vestuario: "Vamos a salir campeones".

Síntesis del partido de vuelta de 4º de final

Boca (1): Javier García; Julio Barroso, Ezequiel Muñoz, Juan Forlín, José María Calvo; Neri Cardozo, Alvaro González, Nicolás Gaitán; Leandro Gracián; Pablo Mouche y Luciano Figueroa. DT: Carlos Ischia.

Internacional (2): Lauro; Alvaro, Indio, Bolívar, Marcao; Edinho, Magrao, Pablo Guiñazú; Andrés D’Alessandro; Alex y Nilmar. DT: Tite.

Cambios: ST al inicio Lucas Viatri por Cardozo (B), 8m Juan Román Riquelme por Gracián (B) y Jesús Dátolo por Gaitán (B), 30m Gustavo Nery por D’Alessandro (I), 44m Rosinei por Magrao (I).
Goles: ST 2m Magrao (I), 11m Riquelme (B), 26m Alex (I).
Amonestados: PT 21m Alvaro (I), 43m Forlín; ST 6m Muñoz (B), 22m Dátolo (B), 37m Figueroa. Expulsado: ST 40m Forlín (B) por doble amonestación.
Cancha: Boca
Arbitro: Oscar Ruiz (Colombia)
Jugado el 6 de noviembre de 2008

domingo, 2 de noviembre de 2008

Desde el cielo te voy a alentar


Emoción. Román marcó el gol de la victoria y se lo dedicó a Pompilio

El partido en el que Boca tenía la posibilidad de alcanzar la punta, de repente adquirió otro significado. La muerte del presidente Pedro Pompilio, tan imprevista como dolorosa, inundó de emociones el domingo. El corazón le dijo basta el jueves y el mejor homenaje que le pudieron brindar los jugadores fue salir a la cancha y dedicarle la victoria. Justamente con un gol de Riquelme, el jugador por el que tanto bregó y pese a la oposición, decidió su compra a cambio de 15 millones de dólares, la incorporación más cara de la historia Xeneize. “No sólo hemos contratado al mejor jugador del mundo para los hinchas de Boca sino en el mejor momento de su carrera. Román va a ser un gran referente para el plantel y un espejo para todos los jugadores que vayan ascendiendo en el club”, había dicho Pompilio en la presentación de Román a fines de 2007.

El corazón de Boca latió más fuerte que nunca en la Bombonera para derrotar a San Lorenzo y alcanzarlo en la cima del torneo junto a Tigre. "Mi viejo soñaba con poder salir campeón en este semestre. El estaba orgulloso del plantel y quería la Copa Sudamericana y el campeonato local. Por eso, les pido por favor que ganen uno de los dos torneos. El, desde el cielo, se los va a agradecer mucho", dijo entre lágrimas Leandro Pompilio -el hijo del fallecido presidente- a los jugadores en el vestuario previo al encuentro.

El conjunto Xeneize transformó en semanas, un escenario de conflictos, platillo preferido de la prensa amarilla, en un sendero de esperanza. Puso el alma en el campo de juego para bajar al Ciclón y sumar su cuarta victoria consecutiva en el torneo. El DT Carlos Ischia incluyó al juvenil Roncaglia en reemplazo del lesionado Morel Rodríguez para conformar una línea de tres zagueros y sumar a Ibarra al mediocampo. Boca arrinconó al equipo de Boedo al inicio con la infatigable labor de Vargas y Battaglia, dos perros de presa en el círculo central. La otra novedad fue la inclusión de Pablo Mouche como puntero derecho, desplazando de la titularidad a Noir, quien con su explosión en los metros finales puso en aprietos a la defensa rival.

El gol de Riquelme llegó a los siete minutos, desde un tiro libre en forma de centro que terminó en remate al arco. El dominio de Boca era manifiesto, pero como cada vez que se encontró en ventaja, careció de serenidad y contundencia para liquidar el pleito. En el segundo tiempo acusó el cansancio y pese a ceder el dominio del balón, San Lorenzo no esgrimió argumentos dignos de un líder del certamen para conjeturar una igualdad. Boca resistió hasta la victoria, el mejor homenaje que le brindaron los jugadores al presidente que desde un rincón del cielo los va a alentar.

Las claves del Boca puntero

Desde que salieron a la luz las internas del vestuario, el plantel de Boca reunió fuerzas en la adversidad para revertir el camino que lo alejaba del título. Llegó a estar ocho puntos por debajo de San Lorenzo y tras cuatro victorias consecutivas, alcanzó el liderato del certamen y se transformó en el máximo candidato al título. El envión anímico que significó la victoria ante River en el Monumental disipó cualquier foco de tormenta y la actuación estelar de los juveniles surgidos de inferiores rejuveneció el alma del equipo.

El mérito de Carlos Ischia fue haber privilegiado el momento futbolístico por sobre los nombres. No dudó en separar del arco a Mauricio Caranta -en una salida poco clara- y poner a Javier García, una deuda histórica de Boca en confiar los tres palos a un arquero surgido de inferiores. El DT se la jugó por Nicolás Gaitán en lugar de Gracián, ubicándolo como ladero de Riquelme y dándole la titularidad en el Superclásico como voto de confianza. Ante la lesión de Palermo y la posibilidad de traer un refuerzo, Ischia le dio la titularidad a Lucas Viatri que respondió a las exigencias del puesto con seis tantos, uno de ellos y el más importante, a River. Ni la llegada de Luciano Figueroa condicionó su presencia en la formación inicial.

La decisión de incluir a Pablo Mouche por Noir, con un nivel ascendente que incluyó el gol de la victoria ante Banfield, fue el último acierto de Carlos II. Es cierto que Riquelme no está en la mejor condición física, pero aún en inferioridad sigue siendo el jugador más desequilibrante en el circuito ofensivo de Boca. Con las asistencias calcadas a Viatri para los goles ante River y Central, la forma de congelar el Superclásico en los minutos finales y el tanto ante San Lorenzo mitad centro y mitad tiro al arco, cualquier controversia sobre la inclusión de un jugador que no está al 100% de sus posibilidades físicas queda desechada si se trata de Juan Román Riquelme.

Síntesis de la 13ª fecha del torneo Apertura 2008

Boca (1): Javier García; Facundo Roncaglia, Julio César Cáceres, Gabriel Paletta; Hugo Ibarra, Fabián Vargas, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; Pablo Mouche y Lucas Viatri. DT: Carlos Ischia.

San Lorenzo (0): Agustín Orión; Santiago Hirsig, Nicolás Bianchi Arce, Cristian Tula, Aureliano Torres; Diego Rivero, Cristian Ledesma, Walter Acevedo, Pablo Barrientos; Gonzalo Bergessio y Andrés Silvera. DT: Miguel Russo.

Cambios: PT 28m Fernando Meza por Tula (SL); ST 16m Luciano Figueroa por Viatri (B), 17m Juan Carlos Menseguez por Barrientos (SL), 23m Adrián González por Hirsig (SL), 25m Nicolás Gaitán por Mouche (B), 43m Carlos Fondacaro por Dátolo (B).
Gol: PT 7m Riquelme (B).
Amonestados: PT 7m Riquelme (B), 12m Vargas (B), 12m Barrientos (SL), 42m Viatri (B); ST 1m Hirsig (SL), 7m Acevedo (SL), 34m Rivero (SL).
Cancha: Boca
Arbitro: Sergio Pezzotta
Jugado el 2 de noviembre de 2008

Te vamos a extrañar

Cuando llegué a Boca en el '98 me mostrabas orgulloso Casa Amarilla, como si fuera el lugar ideal para trabajar con un equipo. Y yo, viendo tu entusiasmo, te dije que el plantel de Boca iba a entrenar todos los días allí, en La Bombonera, algo que en el pasado jamás se había hecho. Me miraste y me dijiste incrédulo: "¿En serio? A los entrenadores anteriores no les gusta entrenar acá porque, cuando la situacion no viene bien, el ambiente se pone difícil, y entonces quieren irse lo más lejos posible". Afortunadamente, en el día de hoy, diez años más tarde, se siguen entrenando en tu segunda casa.

En mi vida futbolística y civil traté con muchas personas, pero rara vez encontré interlocutores con tu calma, tu sentido de la ubicación, tu respeto hacia el prójimo. Católico como soy, mi fe me hace pensar que ya debés estar en un mundo mejor. Quedarás siempre en la memoria y en el corazón de los que te conocimos. Te extrañaremos más de lo que vos mismo te podrías llegar a imaginar. La Casa Amarilla se tendría que rebautizar con tu nombre. Sería un digno homenaje para alguien que le dedicó mucho tiempo de su vida a ese sentimiento llamado Boca. Vos no merecías irte. Siempre estarás en mi recuerdo.

Carlos Bianchi