Este equipo Xeneize, sin ideas futbolísticas, sin respuestas anímicas y sin alma, es capaz de producir un fenómeno insospechado. Como que Racing, en zona de promoción y con grandes chances de revalidar la categoría a fin de la temporada, se lleve una milagrosa victoria de la Bombonera. Claro que Boca le facilitó el trámite del partido con las recurrentes fragilidades defensivas, que le permitieron a la Academia dar vuelta el resultado y que defendió durante el segundo tiempo con neta vocación defensiva.
El cambio drástico de todos los mediocampistas -excepto Riquelme- respecto al último partido, desnudó las dudas que genera el equipo en ese sector, donde el DT Abel Alves aún no encuentra los nombres. El gol de Gaitán llegó tras una brillante jugada asociada entre Román, Monzón y Rosada, que derivó en un pase en profundidad que el ladero de Palermo de cara al arquero, la bajó de pecho y definió de zurda.
Pero dos minutos más tarde, Racing en su primera llegada logró la igualdad. Claudio Bieler le punteó la pelota a Brian Lluy, y con los marcadores a su espalda definió con un zurdazo cruzado. La defensa siguió brindando síntomas de debilidad con dos intervenciones del arquero Javier García quien se volvió figura recurrente de Boca. Cuando restaba un minuto para el cierre de la primera etapa, Pablo Lugüercio llegó hasta el fondo por izquierda, tiró el centro hacia atrás y Gabriel Hauche empalmó de derecha para poner el 2 a 1 parcial.
Buscando mejorar el circuito creativo, Alves cambió nombres e hizo ingresar a Cristian Chávez por Méndez en el inicio del complemento, y minutos más tarde se la jugó con Cristian Erbes, resignando al lateral Villafañe. Sin embargo el juego del mediocampo no mejoró, el conjunto Xeneize se nubló y quedó sin ideas al chocar constantemente con la defensa blanquiceleste. La virtud de Racing fue pegar en el momento preciso para luego abroquelarse en el fondo, apostar al contra ataque y apelar a la simulación de faltas para hacer correr el tiempo.
El delantero Martín Palermo casi no participó, Gaitán se enredó en sus propias gambetas, Insúa no dio pie con bola y Riquelme ya no tenía respuestas ante los desaciertos de sus compañeros. Con un tiempo por delante y con el rival procurando alejar los fantasmas del descenso, Boca chocó frente a la defensa visitante y ante sus propias limitaciones. Las ilusiones se diluyeron paulatinamente y así sumó una nueva frustración que profundizó las viejas disputas internas.
Síntesis de la 8ª fecha del torneo Clausura 2010
Boca (1): Javier García; Santiago Villafañe, Julio Barroso, Luiz Alberto, Fabián Monzón; Jesús Méndez, Ariel Rosada, Federico Insúa; Juan Román Riquelme; Nicolás Gaitán y Martín Palermo. DT: Abel Alves.
Racing (2): Jorge De Olivera; Gabriel Mercado, Matías Martínez, Lucas Aveldaño, Matías Cahais; Juan Carlos Falcón, Claudio Yacob, Brian Lluy, Pablo Lugüercio; Gabriel Hauche y Claudio Bieler. DT: Miguel Russo.
Cambios: ST 0m Cristian Chávez por Méndez (B), 18m Cristian Erbes por Villafañe (B), 21m Sebastián Rosano por Mercado (R), 29m Sebastián Grazzini por Lugüercio (R), 32m Lucas Viatri por Rosada (B), 44m Lucas Castromán por Bieler (R).
Goles: PT 13m Gaitán (B), 16m Lluy (R), 44m Hauche (R).
Amonestados: PT 31m Villafañe (B), 35m Martínez (R); ST 33m Riquelme (B), 36m De Olivera (R), 45m Castromán (R).
Cancha: Boca
Árbitro: Pablo Lunati
Jugado el 6 de marzo de 2010
El dato
Boca resignó una racha de seis partidos invicto recibiendo a Racing en la Bombonera con cinco victorias y un empate. Casualmente, la última derrota que se había registrado en 2002 por 4 a 3 con goles de Marcelo Delgado, Carlos Tevez e Hugo Ibarra en horario matutino, también había quebrado una serie de seis partidos sin derrotas.
La derrota por 2 a 1 ante la Academia en condición de local se repitió por quinta ocasión en torneos locales durante el profesionalismo. Las veces anteriores se sucedieron en 1936 (con gol de Francisco Varallo), en 1938 (Benítez Cáceres, en cancha de Ferro), 1949 (Francisco Campana) y 1975 (Darío Felman).
Las ocho unidades conseguidas en la misma cantidad de partidos, es la peor cosecha de puntos desde que se reparten tres por victoria desde la temporada 1995/96. El peor registro hasta entonces databa del Clausura 2001, cuando en las primeras ocho jornadas Boca había sumado apenas nueve unidades. Por su parte, los mejores registros corresponden al Clausura 1999 (Carlos Bianchi como DT) y Apertura 2006 (Alfio Basile) con 22 puntos.
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